Tenemos que reconocerlo,
los humanos, somos peor, que
la plaga de la langosta......
Me acuerdo de antiguamente, en los años del hambre,cuando los riquillos, se ponían a comer, donde se les
pudiera ver, por que lo hacían aposta, para dar envidia,
aquellas chuletitas de cordero lechal, se permitían el
lujo de dar el primer bocado, a lo magrito, y el resto
lo tiraban, sin "arrebañar", ¡¡ que cabrones!!, que
envidia, nos daban, había un hombre con cara de hambre,
como los demás claro, que decía ¡¡mira mira, se van
a comer hasta la enclavacion!!, y claro de aquellos polvos,
pues ahora estos lodos; y lo malo es que seguimos igual,
y acordándonos de aquello, pues no queremos que nuestro
hijos y nietos, sean del grupo de los de la envidia, y claro,
también nos estamos comiendo hasta la enclavacion, y
claro de estos polvos, pues los lodos que vamos a dejar a
los que vienen detrás, ¡¡pobres, lastima les tengo!!.
Nos estamos cargando el planeta, por tierra, mar y aire.
por cierto, estos últimos días, nos esta dando muestras
de cabreo, ¡¡ y con mucha razón, puñeta,!!
(por no decir, coño).
Nos lo tenemos mas que merecido.
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1 comentario:
Bien, Nico, muy bien. Orgulloso de un suegro así...
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